Pedro Solbes y la ruina de España
Reflexionaba el filósofo Voltaire que, “La idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás.”
Ha muerto Pedro Solbes, el Ministro de Economía que hundió 2 veces el país,. Ahora todo son loas al personaje desde todos los ámbitos de las elites tanto económicas, como políticas, mediáticas o sociales de todo signo y condición. Una muestra más de la miseria moral e intelectual que nos inunda.
Personalmente nunca he sido partidario de esa fea costumbre española de blanquear a los miserables después de muertos, como si la muerte fuera una condena que justificara la contrición de todos los pecados
Así que no me resisto a poner un poco de contexto, cordura y razón en tanta idiotez y postureo nauseabundo, especialmente de algunos que presumen de patrioterismo.
Pedro Solbes es uno de los tipejos de peor calaña que ha parido y sufrido este País, o al menos una parte significativa de los españoles. Porque como siempre, a muchos les va bien cuando a la mayoría le va mal. Y son sujetos como este los colaboradores necesarios para asegurar que las elites mantengan y perfeccionen su estatus.
Es por tanto una figura imprescindible para entender la decadencia económica tras 40 años de socialpopulismo en España.
Fue actor fundamental en la negociación del nefasto acuerdo de incorporación a la UE que propició la desindustrialización de España bajo el paraguas del eufemismo de la “reconversión industrial”, y supervisó su desmantelamiento desde el puesto en la UE que recibió en premio por sus servicios.
En 1991, entra en el Gobierno tardofelipista, cuando la corrupción socialista ya hedía insoportable, siendo nombrado Ministro de Economía en 1993, y dejando en herencia a su sucesor un país desarbolado, empobrecido, endeudado y con uno de cada 4 españoles en las listas del paro.
Tras la recuperación económica del periodo Aznar, vuelve al Gobierno de la mano de Zapatero, sobre la alfombra de casi 200 asesinados en atentado terrorista, para gestionar la herencia recibida, lo bueno y lo malo.
Con Zapatero empieza el largo camino de degeneración política social moral y económica que nos ha llevado al actual abismo. Es él quien apoyado por una piara de menestras y menesterosos indigentes intelectuales a los que puso al mando de los asuntos de Estado, inició lo que eufemísticamente llaman “progresismo”, y la política de radicalización, señalamiento, intolerancia y odio que se ha instalado en la sociedad española.
Tan sólo el hecho de participar de un Gobierno así, y servir de instrumento para facilitar tales fines, lo define y califica como persona.
Bajo su mandato, en lugar de cortar el incipiente proceso de burbuja inmobiliaria, iniciado durante el anterior periodo, lo fomenta y estimula, empujando aún más al alza los precios de las viviendas que acaban por desencadenar la crisis de 2008, en un proceso que ya he descrito tanto en los libros como en este blog.
Para ello se fomentaba el dinero fácil, hipotecas al 120% de valor tasación por periodos de hasta más de 40 años que fomentaban la inflación de la vivienda y endeudaban a las nuevas familias de por vida, aprovechándose de su afán de iniciar sus ilusionante proyecto de vida.
Era el precio impuesto por la élite por intentar cumplir sus sueños y formar una familia. Hoy, gracias a esas políticas de “redistribución, las nuevas generaciones, apenas pueden plantearse tener hijos y aun menos un vivienda en propiedad. Creo que lo llaman “progresismo”.
Un proceso que enriqueció a muchos y regó de dinero al país fomentando el consumo y un crecimiento insano, mientras la industria seguía decayendo, dando una falsa apariencia de abundancia en un país que vivía de deuda privada.
Y cuando estalló la burbuja, fue su nefasta gestión de la crisis la que la acrecentó y fomento la destrucción de millones de puestos de trabajo y un empobrecimiento de la sociedad que se arrastró durante más años, y del que aún no nos hemos recuperado.
De hecho huye de sus responsabilidades incapaz de dar solución al problema dejando nuevamente más de 3,5 millones de parados, millones de familias hundidas, de las que cientos de miles perderán sus casas a manos de la Banca depredadora.
Y es que aún hoy millones de familias siguen pagando unas viviendas que se vieron arrastrados a comprar a unos precios artíficamente hinchados, y a pagar durante décadas, debiendo así retraer de sus rentas, consumo presente y calidad de vida, el dinero para pagar los créditos que fueron a parar entonces a manos de otros que se enriquecieron del proceso de burbuja inmobiliaria.
Gracias a gentuza como él, millones de familias siguen pagando sus viviendas, entonces sobrevaloradas y hoy devaluadas, y ven ahora las cuotas de sus hipotecas subir hasta límites insoportables, empobreciéndoles aún más, y en muchos casos haciendo que necesiten de la ayuda de sus mayores jubilados para sobrevivir, si tienen suerte.
Y lo peor que todo este repugnante proceso de “redistribución de rentas” desde las clases humildes a las elites que fomentó el finado, siquiera sirvió para reforzar la economía real, más bien al contrario, hundirla en vicios e ineficiencias que ahora dificultan e impiden el desarrollo.
De hecho el PIB de España a precios constantes, era en 2019 igual al de 2008. Y 3 años después el Doctor Sánchez ha logrado que se retraiga un 4%, a pesar de aumentar el gasto público hasta representar más de la mitad de la economía española y la Deuda Pública en casi 200000 millones de euros.
Un país quebrado. Una economía moribunda incapaz de crecer, cuyos cimientos arenosos contribuyó a colocar hace más de 15 años.
El balance de sus años de colaboracionismo con el “proyecto zapaterista” fue paupérrimo. A pesar del chorro de dinero procedente del endeudamiento de familias y empresas, el crecimiento entre 2005 y 2009 fue del 8,5%. Ello representa una media del 1,6% anual. Es lo que llamaban los sectarios de la época, la “champions leage” de la economía.
¿A dónde fue a parar todo el dinero del sobreendeudamiento privado que se fomentó?. Evidentemente no a inversión productiva, sino a gastos suntuarios, inversión financiera y sobre todo más ladrillo que cebo aún más el proceso de la burbuja.
Como anécdota de su habilidad como economista, entre sus méritos de aquella “Belle Epoque” de la economía está haber vendido las reservas de oro de España por un tercio del valor, para invertir en valores de renta fija que luego perderían todo su valor. Un auténtico visionario.
Tampoco hay que olvidar que éste sabio de la Economía es quién animaba en 2008 a los españoles a irse de vacaciones y gastar su dinero a sabiendas que a la vuelta de las mismas muchos se encontrarían con la puerta de sus empresas cerradas.
Y sin embargo, a pesar de su manifiesta incapacidad económica no tardó en encontrar acomodo en una empresa del oligopolio eléctrico en pago de sus favores para que Endesa acabara en la órbita de la italiana ENEL. Y luego dicen que la electricidad es cara.
Pero que nadie se equivoque, Solves tan sólo fue un gañan más en este proceso de destrucción progresiva de la Economía española, un lacayo fiel y bien pagado por sus servicios.
Y es que la quiebra en la que lleva instalada España desde hace 15 años tiene muchos padres, y aun más “padrinos”. Pero desde luego no cabe duda de su contribución para plantar la semilla de la destrucción de la economía fue decisiva.
Un personaje que ha creado ruina miseria y dolor a su paso. Un “Caballo de Atila” que dejó desolación y desmantelamiento de la economía real. Un pastelero del suflé financiero.
Este es el personaje al que hoy se loa por el mero merito de haber muerto.
“La idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás.”, Y quien olvida la historia, o la dulcifica, está obligado a repetirla. Sólo reconociendo y asumiendo la realidad de nuestro triste Historia reciente y señalando a sus culpables, podremos empezar a enderezar nuestro destino y apartarnos la senda que trazaron hacia el abismo.
La burbuja inmobiliaria no va a pinchar.
31/06/200
Estamos ante una gradual desaceleración. Se trata de una evolución natural y un fenómeno saludable. Si llegaran las vacas flacas, las afrontaríamos con gran tranquilidad gracias al superávit de las cuentas públicas.
10/01/2008
Los que auguran el riesgo de recesión no saben nada de economía. Estoy harto y agotado por la cantidad de tonterías que oigo últimamente sobre el mundo económico. La economía española crecerá en la próxima legislatura a un ritmo cercano al 3%, lo que permitirá crear 1,6 millones de nuevos empleos y mantener la tasa de paro en torno al 8% de la población activa.
11/02/2008
Nosotros no hemos negado nunca la crisis.
25/09/2008
No hay una preocupación especial e inmediata sobre nada ni nadie. El sistema financiero español es enormemente sólido.
30/03/2009
Pedro Solbes
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