El poder de las matemáticas
Un concursante llega a la final y el presentador le ofrece elegir entre 3 puertas. Detrás de una de ellas hay un coche y detrás de las otras dos hay un botijo.
El concursante elige una puerta, y el presentador, que sabe dónde está el coche, abre una de las otras dos puertas que ha descartado, la cual obviamente contiene un botijo. Luego, le hace la gran pregunta al concursante: ¿Quiere cambiar de puerta?
Para la mayoría, la respuesta tan sólo depende de la intuición, ya que asumen que ahora la probabilidad de que el coche esté en alguna de las dos puertas restantes es del 50%. Sin embargo, matemáticamente, la respuesta correcta es cambiar de puerta. ¿Cuál es la razón?
Inicialmente, cada una de las puertas tiene un 33% de posibilidades de ocultar el coche. Sin embargo, cuando el presentador abre una de las dos puertas que no han sido elegidas, pueden ocurrir dos situaciones: si el concursante había elegido la puerta correcta, el presentador puede abrir cualquiera de las otras dos puertas, pero si no era la correcta, el presentador solo puede abrir la puerta que no contiene el coche.
Por lo tanto, la decisión del presentador está condicionada y cambia la perspectiva. Antes, la probabilidad de que el premio estuviera en cada puerta era del 33%, pero ahora la probabilidad de que esté en la puerta inicialmente elegida sigue siendo del 33%, mientras que la probabilidad de que esté en la puerta que sigue cerrada aumenta al 66%. Por lo tanto, la decisión correcta sería cambiar de puerta.
Este es tan sólo un ejemplo práctico de la aplicación de las matemáticas al mundo real y de cómo, en muchos casos, la lógica común falla si no se aplican las matemáticas.
Las matemáticas son una herramienta fundamental para el desarrollo cognitivo y para poder pensar y tomar decisiones acertadas. Se puede decir que las matemáticas mueven el Mundo, ya que están presentes en casi cualquier cosa que veamos a nuestro alrededor, en mayor o menor medida. Sin embargo, cobran aún más importancia en la moderna sociedad de la tecnología de la información y la comunicación.
Si nos trasladándonos al día a día de la persona común, las matemáticas también son una herramienta indispensable para el correcto procesamiento cognitivo y la toma de decisiones, desde las más trascendentales hasta las más domésticas, como realizar una compra adecuada, y sobre todo, para evitar ser manipulados y poder tomar decisiones acertadas.
Para ello, es importante entender que hay dos niveles bien diferenciados en las matemáticas, e incluso se podría decir que hasta tres. Por un lado, están las matemáticas prácticas, útiles para el día a día de las personas, y por otro lado, hay un nivel superior que es útil a nivel organizativo, para actividades empresariales y otros tipos de instituciones, como las productivas, financieras, administrativas, de ventas, investigación, entre otras. Incluso más allá, existen las matemáticas puramente teóricas, que tienen una utilidad más limitada pero que contribuyen al conocimiento humano.
Es evidente que para la mayoría de los ciudadanos no es necesario saber resolver ecuaciones diferenciales, determinantes o integrales. Sin embargo, como humilde operador de teclado, en ocasiones he podido aprovechar esos conocimientos como herramienta para comprender adecuadamente algunos conceptos, especialmente relacionados con mi antigua profesión militar.
Al menos para considerar a una persona «alfabetizada» en matemáticas, debería ser capaz de realizar operaciones básicas como sumas, restas, divisiones y multiplicaciones con números de varias cifras, además de entender y aplicar conceptos básicos como porcentajes, potencias y raíces cuadradas y cúbicas, proporciones, ecuaciones de primer y segundo grado, estadísticas, trigonometría, cálculo de áreas, operaciones con fracciones y conjuntos, números positivos y negativos, y aplicarlos de manera efectiva a situaciones de la vida real.
En la actualidad, la mayoría de la población ni siquiera alcanza ése nivel mínimo de cultura matemática. Incluso una gran parte de los recién graduados de secundaria no comprenden y son incapaces de aplicar muchos de estos conceptos en la vida real. Esto los hace muy manipulables, ya que les impide descubrir engaños, incluso los más evidentes.
Por otro lado, el aprendizaje matemático infantil es importante por sí mismo, incluso, más allá de su utilidad práctica. Crea las condiciones para un óptimo desarrollo cognitivo en el momento en que el cerebro está en pleno desarrollo, generando una serie de efectos beneficiosos:
- Desarrollo del pensamiento analítico.
- Desarrollo de la capacidad de investigar y conocer la verdad sobre el mundo que nos rodea.
- Aumenta la capacidad pensamiento
- Aumenta la curiosidad y el interés por conocer cómo funcionan las cosas
- Fomenta la sabiduría.
- Aumenta la agilidad mental
- Aumenta la capacidad de resolución de problemas
- Aumenta la capacidad de adaptación y flexibilidad
Todo esto permite el aumento del potencial de desarrollo de la inteligencia general del niño. Por lo tanto, el aprendizaje matemático debe trascender la mera utilidad cotidiana y práctica.
Además, su uso habitual, incluso más allá de las necesidades cotidianas, a través de pasatiempos matemáticos, ayuda a entrenar el cerebro, mantener la agilidad mental, prevenir el deterioro cognitivo, e incluso enfermedades mentales.
“La historia hace ilustrado al hombre; la poesía, ingenioso; las matemáticas, sutil.”
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